Anatel propone ajustes a la ley de apuestas en Brasil
El presidente de la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) de Brasil, Carlos Baigorri, ha propuesto cambios a la legislación que regula a los operadores de apuestas con el objetivo de fortalecer las medidas contra sitios web ilegales, mientras el país se prepara para el lanzamiento oficial de su mercado regulado en enero de 2025.
Ajustes legales propuestos para el bloqueo digital
Anatel ha identificado lagunas en la legislación actual, especialmente en la sección que aborda el bloqueo digital de plataformas no autorizadas. Los ajustes propuestos buscan ampliar las capacidades de Anatel para incluir mecanismos dirigidos a operadores de DNS, redes de distribución de contenido (CDNs) y sistemas VPN, herramientas frecuentemente utilizadas para eludir las restricciones de conexión. Estos cambios están diseñados para mejorar la eficacia en la eliminación de sitios ilegales.
El Ministerio de Hacienda solicitó recientemente el bloqueo de aproximadamente 5,200 sitios web ilegales. Sin embargo, Anatel ha señalado que, bajo la legislación actual, carece de autoridad para garantizar el cumplimiento por parte de entidades internacionales como proveedores de VPN y CDN. Las enmiendas propuestas están diseñadas para cerrar estas brechas legales y fortalecer las capacidades de aplicación, asegurando la integridad del mercado de apuestas regulado en Brasil.
Propuesta separada para restringir la publicidad de apuestas
En paralelo, el senador Eduardo Girão ha impulsado su proyecto de ley (PL 3.405/2023), que busca limitar la publicidad relacionada con las apuestas deportivas. La propuesta legislativa pretende prohibir la participación de equipos deportivos, celebridades y comentaristas en campañas publicitarias de apuestas, citando preocupaciones sobre la influencia de estas figuras en audiencias jóvenes. El proyecto de ley establece comparaciones con las restricciones históricas a la publicidad de cigarrillos, enfatizando la necesidad de medidas similares para prevenir la normalización del juego en grupos vulnerables.
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